Malos habitos orales
Los hábitos orales son acciones involuntarias, repetitivas y permanentes en el tiempo que pueden ser suprimidas por mecanismos de reeducación.
El hábito es una costumbre que provoca una acción mecánica dando lugar a una deformación y, posiblemente, a una modificación de la posición dental o a una interferencia en el crecimiento. Chuparse el dedo y morderse las uñas son ejemplos de hábitos orales que pueden desencadenar una mordida abierta anterior y un resalte de los dientes frontales superiores. Desde la Clinica Bonadent proporcionamos técnicas y tratamientos a nuestros pacientes tanto para abandonar el hábito como para corregir las imperfecciones que haya podido producir.
Tipos de hábitos orales y sus consecuencias
Los especialistas en odontología diferencian entre 3 tipos de hábitos orales:
Hábitos primarios: son los primeros que aparecen partiendo de la normalidad, pudiendo tener un origen espontáneo o ser debidos a una deficiente maduración funcional.
Hábitos secundarios: aparecen como consecuencia de la deformación morfológica provocada por un hábito primario, a la que suelen acompañar. De este modo, los hábitos secundarios derivan de los anteriores.
Hábitos combinados: los hábitos combinados describen una situación de simultaneidad entre un hábito primario y uno o más hábitos secundarios.
La presencia de los malos hábitos orales puede tener un efecto marcado sobre las estructuras faciales en desarrollo y la dentición del paciente. Las maloclusiones son un fenómeno corriente derivado de la práctica sin control de dichos hábitos. En este sentido, en Clínicas Propdental tratamos la normoclusión, la maloclusión leve y la maloclusión grave en nuestras consultas de ortodoncia y mediante técnicas de aparatología. En el caso de pacientes que presenten maloclusiones muy graves, nuestros dentistas en clínica informan del requerimiento de cirugía para ser tratados, ya que este tipo de malocusiones a menudo se asocian a síndromes complejos.
Los hábitos pueden degenerar a disfunciones orales que, en ocasiones, pueden requerir tratamientos estéticos complejos. La deglución atípica o la respiración oral conforman las disfunciones orales más frecuentes entre los pacientes de Bonadent.
Deglución atípica
La deglución atípica aparece por falta de cierre anterior debido, principalmente, a la interposición lingual y la interposición labial.
Interposición lingual: se trata de un hábito secundario que puede aparecer como consecuencia de la alimentación a través del biberón, amígdalas hipertróficas, la pérdida prematura de los incisivos temporales, la succión digital o de la respiración bucal.
Interposición labial: la interposición labial se relaciona con un proceso de succión labial. El labio inferior se coloca detrás de los incisivos superiores y en contacto con la lengua, contribuyendo a la aparición de una protrusión de dichos incisivos. Los músculos mentonianos se convierten en hipertónicos como consecuencia de la succión y se produce un desarrollo incorrecto del hueso alveolar inferior.
Nuestros dentistas en Porpdental advierten que una deglución atípica no eliminada puede acabar afectando, además de lo anterior, a los dientes inferiores. Asimismo, combinada con una posición baja de la lengua, puede llevar a la aparición de una mordida abierta, un aumento del resalte dentario y la compresión del maxilar superior, ante la ausencia de la compresión lingual habitual.
Respiración oral
La respiración oral es una condición relativamente frecuente sobretodo en pacientes que presentan insuficiencia respiratoria nasal. Para poder respirar, tienen que buscar nuevas vías, por lo que recurren a la respiración bucal. Como consecuencia de ello, se produce la obertura bucal, un descenso de la lengua y una posterorrotación mandibular para poder conseguir el aire necesario. Se establece una respiración oral crónica que conlleva un escaso desarrollo nasal y de los senos paranasales.
En Clínicas Propdental, entre las causas de la respiración oral diferenciamos:
- El espació de los orificios nasales se ve disminuido, por lo que el paciente presenta orificios nasales angostos.
- Una desviación del tabique nasal que requiere, también, de un buen diagnóstico del otorrinolaringólogo.
- Problemas de cornetes
- Adenoides hipertrófico o carnots. Los pacientes con cara estrecha y larga, mejillas flácidas, orificios nasales pequeños y orientados al frente, labio superior corto, labio inferior grueso, linguversión de los incisivos inferiores y labioversión de los incisivos superiores son propicios a desarrollar adenoides hipertrófico.
- Amígdalas palatinas hipertróficas: el aumento del tamaño amigdalar obliga a la lengua a adoptar una posición baja, de modo que busca como objetivo final la respiración oral mediante una contracción de la arcada superior o un proceso de biprotrusión dental.
- La respiración oral puede venir provocada por una rinitis alérgica. Es característico de estas pacientes presentar enrojecimiento de la mucosa oral y nasal y en la conjuntiva del ojo.
El tratamiento del paciente con respiración oral es realizado de manera multidisciplinar, con la actuación conjunta del médico, otorrino, odontólogo y ortodoncista. Es importante diagnosticar estos pacientes a edades tempranas para evitar alteraciones dentomaxilofaciales, estéticas, psíquicas y funcionales severas.
Los hábitos modifican la posición dental, producen interferencias en el crecimiento y pueden ser suprimidos por un mecanismo de reeducación controlado y administrado por su dentista . La valoración de estas conductas debe abarcar una evaluación completa del hábito en sí mismo y de la presencia o posibilidad de repercusiones sobre la salud oral, así como de la necesidad de instaurar un tratamiento precoz que limite o corrija las repercusiones ocasionadas por dichas costumbres. En Clínicas Propdental somos plenamente conscientes de la importancia que supone tanto su salud bucal como la estética de la misma. Por ello, nuestros especialistas están dispuestos a echarle una mano con aquellos hábitos incómodos y a corregir el daño que hayan podido ocasionar.
